Preparar un bistec perfecto es una de las habilidades culinarias más apreciadas, y aunque parece sencillo, conseguir ese equilibrio entre un interior tierno y jugoso, requiere ciertas técnicas y atención.
Ya sea que prefieras la carne, bien cocida o en su versión más jugosa, seguir unos pasos clave te permitirá disfrutar de un bistec digno de cualquier restaurante.
Acompáñanos a descubrir cómo lograrlo en tu propia cocina, con los ingredientes y tiempos justos para un resultado espectacular.
Procedimiento:
- Lavas el bistec hasta que la sangre no esté tan visible, bajo agua obviamente.
- Adobas el bistec por ambos lados y le das un masaje con las manos para que el adobo se distribuya bien.
- En una sartén, después de colocar el bistec, echas por lo menos 1/2 taza de aceite y 1/2 taza de vinagre blanco. Lo ajustas dependiendo cuánto bistec estés haciendo.
- Con una cuchara echas aproximadamente dos cucharadas de ajo molido y te aseguras de distribuirlo bien en todas las carnes.
- Cortas una cebolla entera y la distribuyes en la sartén.
- Finalmente cocinar a fuego lento.
Esta porción rinde para dos a cuatro personas.
¡Buen provecho!